La web randonneurs define las brevet como marchas ciclistas de gran fondo no competitivas (con un mínimo de 200 kilómetros), que se realizan con tráfico abierto y que se deben completar en un tiempo mínimo prefijado. Aunque se están convirtiendo en tendencia actual del ciclismo, en realidad se trata de un concepto histórico vinculado a los orígenes de este deporte, cuando, en el siglo XIX, según relata la web Iamrandonneur, un grupo de ciclistas aficionados decidió enfrentarse al reto de recorrer 230 kilómetros entre Roma y Nápoles entre la salida y la puesta de sol. Los medios de la época se hicieron eco de la hazaña y otros aficionados decidieron emular la gesta con otros recorridos en lo que fue el nacimiento del ciclismo de larga distancia.
En las brevets los participantes deben ser autosuficientes y, por tanto, no existen avituallamientos oficiales como sucede en las marchas clásicas. Los organizadores marcan un recorrido con diversos pasos obligatorios donde van sellando al participante un certificado que acredita que va cumpliendo con el desarrollo de la brevet. De hecho, brevet es una palabra francesa cuyo significado en esta acepción es diploma, título. Ya que el objetivo de estas pruebas es otorgar a los participantes un certificado oficial de su participación, la cantidad de kilómetros recorridos y el tiempo invertido.

Los controles suelen ubicarse en bares o restaurantes, de manera que los participantes aprovechan la parada para reponer fuerzas, alimentarse y beber.
El carácter oficial de estas pruebas proviene del Audax Club Parisien, un club ciclista francés que tiene el poder de homologación a nivel mundial. Desde 1921 todas las brevets que se han organizado quedan registradas en la base de datos de este club y se les otorga un número de homologación por orden cronológico.
Los clubes que organizan brevets deben contar, a su vez, con la homologación del Audax Club Parisien. En España actualmente hay menos de 20 clubes que organizan brevets, podéis encontrar el listado de los 18 clubes que han organizado brevets en 2017 en este link. Para que os hagáis una idea, en una gran ciudad como Madrid, solo el CC Pueblo Nuevo y el CC Chamartín organizan este tipo de pruebas.
La mayoría de las brevets tienen un recorrido de 200 kilómetros, pero como siempre hay un reto mayor, existen brevets de 300, 400, 600, 1000 e incluso 1200 kilómetros. De hecho, para participar en las superbrevets de 1000 kilómetros, con las que se obtiene una medalla de color platino, se debe acreditar la participación en todas las brevets de kilometraje inferior (200, 300, 400 y 600 durante el último año), una manera de garantizar que los participantes pueden cumplir con las expectativas de la prueba.
Los tiempos máximos que se pueden emplear para efectuar cada brevet están en función de la distancia: 13h30′ (200km), 20h (300km), 27h (400km), 40h (600km) y 75h (1.000km).
En España la superbrevet por excelencia es la Madrid-Bilbao-Madrid (1000 kilómetros), que se organiza cada 4 años. Y en el mundo la más prestigiosa es la francesa París-Brest-París (1200 kilómetros).
Para más información sobre el desarrollo de las brevet, puedes consultar el reglamento en este enlace.
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